Por: Bryan Steven Cardona Ciceri

El presidente Gustavo Petro denuncia una conspiración en el Congreso para derribar la reforma pensional, liderada por Iván Name, investigado por corrupción.

En un escenario de intensa disputa política, el presidente Gustavo Petro ha lanzado una acusación directa contra Iván Name, presidente del Senado, por obstruir la reforma pensional que busca beneficiar a millones de colombianos. Según Petro, esta reforma es crucial para garantizar una vejez digna para la población, pero enfrenta resistencia en el Congreso, especialmente de sectores de oposición.

El mandatario utilizó su cuenta de X para expresar su frustración, mencionando que Name, quien recientemente fue capturado por cargos de corrupción, ha estado "engavetando" la iniciativa durante siete meses. Petro señaló que esta acción forma parte de una estrategia más amplia para mantener un sistema financiero que considera insostenible, afectando directamente a tres millones de ancianos del país.

Además, el presidente destacó que de los 20 congresistas actualmente investigados, 16 votaron en contra o se abstuvieron de apoyar la reforma. Esto, según Petro, evidencia un claro intento de sabotaje. La situación se agrava con la amenaza de que la Corte Constitucional pueda tumbar la reforma, a pesar de que, según el ejecutivo, el proyecto ha cumplido con todos los requisitos legales.

Esta confrontación no solo pone en juego el futuro de la reforma pensional, sino que también plantea serias preguntas sobre la integridad y la transparencia del proceso legislativo en Colombia. El enfrentamiento entre el presidente y sectores del Congreso podría tener profundas repercusiones políticas y sociales, afectando la confianza en las instituciones del país y la vida de millones de ciudadanos que dependen de estas decisiones.